Añade una copa de vino a tu selfie o una botella en tu bodegón de Instagram y sube enteros como experto en vinos al tiempo que ganas seguidores. Ser winelover –y mostrarlo- está ahora más de moda que nunca.

Las claves de todo winelover en redes

Instagram es la red social preferida en estos momentos: la imagen es la protagonista, es visual y, además, reina el buen rollo, a diferencia de otras como Twitter, en la que proliferan los haters. A la llamada food photography, ahora se le une, cada vez con más fuerza y aficionados, la wine photography. Sigue estos consejos si quieres ser todo un influencer de un excelente Ribera del Duero como Altos de Tamarón o de cualquier otro vino en redes sociales.

  1. Selfies y retratos. Si la fotografía es un retrato con vino, es decir, si tú eres el protagonista, intenta mostrar naturalidad. Puedes sostener la copa en la mano, acercar la nariz al vino en «modo sumiller», fotografiarte en el momento en que estás sirviendo el vino de la botella o brindando. Y aunque puede haber otros elementos en la escena, como un decantador, evita interactuar con ellos, porque lo más probable es que queden forzados. Un selfie de alguien midiendo la temperatura de un vino con el termómetro corre más riesgo de quedar un poco forzada a mostrar conocimientos sobre vino.

 

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  1. El vino como protagonista absoluto. Si por el contrario el vino es el protagonista de tu fotografía, intenta crear un bodegón atractivo: llenar una copa alta hasta un tercio de su capacidad, colocar una elegante botella de un Ribera del Duero con mucha presencia y cuerpo como Altos de Tamarón Gran Reserva en segundo plano y añadir algún otro elemento. Un recurso que puede crear instantáneas preciosas es un primer plano de tu mano cogiendo la copa de vino. Para estas fotos, eso sí, debes esmerarte en todos los detalles: manicura, limpieza impoluta de la copa, llenar hasta su punto exacto…
  2. Vino y comida. El maridaje es una opción ganadora, fotográficamente hablando. Introduce un plato de comida, o mejor aún, una mesa con diferentes platos de picoteo junto al vino. Una tabla de quesos y otra de embutidos son apuestas seguras combinadas con un tinto reserva.
  3. Cuida la iluminación. La mayor parte de las malas fotografías de una copa de vino o de un plato de comida se podría mejorar con tal solo una buena iluminación. Si dispones de luz natural, mejor que mejor y, si necesitas iluminación, evita las fuentes muy duras y directas. No olvides tampoco la temperatura de color. Si usas iluminación cálida, tus fotos ofrecerán colores tirando a anaranjados. Compénsalo o usa, preferiblemente, luces frías.
  4. Escena y composición. No hay una regla fija en cuanto a la composición y la escena, aunque lo ideal es respetar las normas generales de la fotografía: la regla de los tres tercios que aleja el punto de atención del centro de la fotografía. En todo caso, deja aire hacia donde mire una persona y cuida todos los elementos de la escena. No dejes un plato de comida con una copa de vino ahí, solos y desamparados… Añade elementos como cubiertos, un paño o algún otro objeto en segundo plano.
  5. Stories. Las stories generan mucho tráfico y te permiten libertad, añadir frases e iconos, usar gifs, hacer preguntas y encuestas…. con la libertad de que son efímeras.
  6. Sigue los comentarios y contéstalos. Si decíamos que las stories son efímeras, las publicaciones y los comentarios son permanentes, de modo que no te olvides de ellos. Intenta contestar todos los comentarios y darles like. No hacerlo da imagen de despreocupación y de falta de interés por tus propios seguidores.

No olvides el hashtag

Recuerda meter hashtags para que tus publicaciones se posicionen y, sobre todo, lleguen a más personas con los mismos intereses. Lo ideal es que, en función de cómo sea tu publicación, elijas entre unos y otros para no usar siempre los mismos y no poner demasiados, que tampoco queda bien.

Eso sí, los más importantes, los que no debes olvidar porque son los más seguidos y los que mayor número de publicaciones acumulan en Instagram, son #wine, #winelover, #vino #vin, y #winetime. Cuando te fotografíes con una copa de Altos de Tamarón, o incluyas la botella en el bodegón que has formado con el picoteo del día, etiqueta a la bodega y además incluye #AltosdeTamaron, #riberadelduero, #doribera o #PagosdelRey. Otros hashtags que eventualmente también podrás usar son #vinotinto #vinosespañoles #winetasting, #winelife, #wines, #redwine, #winestagram, #crianza. #enoturismo, etc.

Luego hay una serie de hashtags más divertidos, que en ocasiones hasta los puedes inventar al momento y no buscan posicionar la publicación, sino más bien darle un poco de frescura. #riberitarico #nosinmivino #estabotellacae. Divertidos, ¿verdad?

Por último, están los hashtags no relacionados con el vino, pero que ponen en contexto la publicación y le dan sentido. Dependerán del contexto, la fecha y cómo sea la fotografía. Nos referimos a hashtags tales como #picoftheday, #amigos, #Sunday, #style, #yummy, #alsol, etc.

Las bodegas en redes sociales, cercanía y diálogo directo

A través de las redes sociales las bodegas han encontrado un canal perfecto para mantener una comunicación directa con sus clientes. Instagram es perfecta para acercar el mundo del vino de una forma muy sencilla y visual.

El terruño, las vides, los racimos de uvas… ¿pueden ser más fotogénicos? Es un canal para que las bodegas muestren su esencia a través de bellas instantáneas. También a través de Instagram las bodegas dan a conocer el trabajo de la vendimia o las barricas en la bodega, en las que envejecen los vinos. Igualmente, pueden sugerir maridajes, proponer planes con vinos y brindar todo tipo de consejos, como esta guía para diferenciar un buen vino.

 

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En su cuenta de Instagram, Pagos del Rey muestra toda su variedad de vinos, procedentes de sus bodegas en Ribera del Duero, donde se elabora Altos de Tamarón, buque insignia de la casa; pero también de Rueda, Toro y Rioja.

Gracias a Instagram, el mundo del vino ha dejado de parecer difícil y ajeno al público más joven, como los millennials, cada vez más interesados en el vino, pero desconocedores del tradicional lenguaje que lo caracteriza. Quieren disfrutar del vino, aprender nociones de cata, experimentar, probar y, en definitiva, jugar. Pero rechazan los formalismos y los aspectos más técnicos de la sumillería. Y las redes sociales han facilitado mucho ese encuentro.

En la Red, los amantes del vino no están a por uvas, están a por vino

En el año 2020, la venta online de vino ha vivido un impulso sin precedentes. El confinamiento más estricto de los primeros meses nos llevó a aumentar el consumo de vino en casa y a comprarlo online. Tras el verano, las restricciones en la hostelería, toques de queda y cierres perimetrales han mantenido las ventas por este canal. Aun sin cifras oficiales por parte de la patronal del vino, los expertos consideran que esta tendencia ha llegado para quedarse, incluso cuando vuelva la normalidad al turismo y la hostelería.

Frente al desplome de la venta a la hostelería, la minorista se ha mantenido y la venta online ha crecido. Hablamos de la venta online en los supermercados, comercios, plataformas especializadas y, por supuesto, la venta directa al cliente, también online, por parte de las bodegas.

En este sentido, las bodegas han hecho un enorme esfuerzo. Es el caso de la tienda online de Pagos del Rey, con atractivas ofertas y promociones. Por ejemplo, con la compra de una caja con seis botellas de Altos de Tamarón Reserva, el comprador recibirá de regalo otra caja de Blume Verdejo Selección. Altos de Tamarón Reserva es un vino de 2016 calificado con 91 puntos el prestigioso ranking del sumiller James Suckling y ha recibido este mismo año diferentes premios, como el oro en el prestigioso concurso Mundus Vini.

Además, los gastos de envío son gratuitos por compras a partir de 30 euros y, en este momento, Pagos del Rey tiene otra promoción vigente, el regalo de 3 o 6 copas Riedel Magnun por pedidos superiores a 60 o 120 euros, respectivamente. Para hacer regalos, la bodega cuenta con dos modalidades de cajas de madera. Un estuche para 3 botellas y otro para 6.

Para redondear la experiencia online, el museo del vino de Pagos del Rey ofrece ahora mismo un interesante tour virtual, perfecto para abrir boca hasta que podamos volver a viajar con normalidad y a hacer turismo enológico.